En Neuquén, avanza un proyecto de ley para que se limite la portación de las armas reglamentarias a los policías y agentes penitenciarios provinciales denunciados por violencia de género. La iniciativa, presentada por la Subsecretaría de las Mujeres del municipio capitalino, pretende que no puedan tener acceso a ellas fuera de su horario de servicio.
Alejandra Oehrens, titular de la Subsecretaría de las Mujeres de Neuquén, explicó de qué va el proyecto. “Se busca que lleguen las denuncias de violencia de género contra ellos a la fiscalía. Allí, darle un tiempo aproximado de 12 horas al juez de para que active el desarme del varón violento, como una medida preventiva para evitar el femicidio”, detalló.
También aclaró que se necesitan otras medidas de acompañamiento. “Requerimos que se lo someta a tratamiento psicológico y que se le designen otras tareas dentro de la fuerza, no que lo dejen sin trabajo ni sin cobrar su sueldo”, añadió.
Adiós a las armas
Esta propuesta ya había sido abordada en 2016, en una guía de actuación para casos de violencia doméstica. En ese entonces, la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres estableció como primordial sacar las armas del hogar apenas se reciba una denuncia por motivos de género.
En este sentido, la iniciativa indica cómo proceder en casos donde exista una denuncia por violencia de género o intrafamiliar con medidas dictaminadas por las leyes y/o una denuncia penal vigente. Para tales situaciones, el código propuesto determina que el agente deberá retirar el arma al ingresar a la jornada de servicio y devolverla una vez finalizado su trabajo.
A su vez, el texto, que avanza en la legislatura, establece que la policía provincial deberá modificar sus normas y procedimientos internos. Estos cambios deben hacerse con el fin de adecuarlas y determinar los casos específicos en los que se aplicará la restricción al uso de armas reglamentarias.
Respecto al acompañamiento de les legisladores, la subsecretaria fue positiva. “Hablamos en la comisión y le pedimos que dejen los banderismos políticos de lado y que se aboquen a trabajar para poder garantizar el derecho a la vida a las mujeres”, expresó.
“Nos dijeron los que están en esta comisión, que pertenecen al Frente de Todos, a Cambiemos y al Movimiento Popular Neuquino, que todos van a acompañar con sus votos y que van a hacer algunos aportes”, contó Alejandra. “Esperamos que prontamente los traten en el recinto y no pasen otros dos años”, agregó.
Neuquén vs la violencia de género
El proyecto de ley se sustenta en los datos de violencia que involucran a integrantes de las fuerzas. Según el observatorio provincial, el 10% de las denuncias por violencia de género que llegan al área tienen como denunciados a policías o agentes penitenciarios.
“Me parece que el tiempo es hoy”, sostuvo Oehrens al respecto. A su vez, agregó: “En los últimos dos meses los casos que están llegando a la Subsecretaría han aumentado en un 100%, lo que es más que un llamado de atención”.
Otros proyectos
El proyecto de desarme de varones violentos no es el único presentado por la Subsecretaría, la cual se creó hace dos años. Otras dos iniciativas buscan expulsar al varón violento del hogar familiar y sancionar a los trabajadores municipales denunciados por motivos de género.
“Lo más importante es la expulsión del violento del hogar para que la mujer con los niños no quede en situación de calle”, expresó. A su vez, mencionó que muchas veces estas “no tienen donde vivir, para comer, ni un sustento económico para salir adelante”.
En este sentido, mencionó la diferencia entre las mujeres en situación de violencia y los victimarios. “Mientras el varón violento queda en la casa con una vida normal en el barrio, con su trabajo y su vida cotidiana no se altera para nada, las víctimas quedan en la calle”, denunció.
En la misma línea, hizo referencia a un tercer proyecto que pretende que los trabajadores municipales de Neuquén con denuncias por violencia de género sean destituidos de sus cargos y sus puestos sean ocupados por las víctimas.