En el marco de un acuerdo entre el Municipio de nuestra ciudad, a través de la Dirección de Bromatología, y la Escuela Provincial de Educación Técnica N°4 de Junín de los Andes, personal municipal acompañó experiencias educativas de alumnos y alumnas de sexto año de la especialidad de Ciencias de la Alimentación, con el fin de complementar su formación.
Entre los meses de mayo y agosto se desarrollaron actividades de cooperación institucional y de asistencia técnica destinadas a facilitar y fortalecer la vinculación entre el nivel secundario y el mundo del trabajo bromatológico. En este contexto se desarrollaron pasantías y unidades educativas, estimulando el intercambio de experiencias, materiales didácticos, publicaciones y recursos para reforzar estas acciones.
“Los y las estudiantes salieron con nosotros en los controles, donde les explicamos cómo se realizan los procedimientos, qué cosas se deben tener en cuenta, preparándolos para las futuras labores que implicaría ingresar al mundo de la Bromatología”, expresó Rogerio Martínez, director del área bromatológica municipal.
Esta semana, en la última recorrida general que el grupo de estudiantes concretó en la localidad, visitaron comercios de distintos rubros, como panaderías, rotiserías y almacenes, focalizando en conocer las metodologías de trabajo y los eventuales procedimientos de clausura. “Los pudimos instruir en los mecanismos administrativos y operativos del tratamiento de mercadería que ingresa a un comercio, el depósito, el proceso de distribución y separación de productos, entre otros temas que hacen a nuestra labor diaria”, completó el Director.
Cabe mencionar que también se les instruyó en la recepción correcta de una muestra de alimento, cómo asistir en un análisis bacteriológico de productos gastronómicos, así como en el mecanismo de detección de bacterias patógenas a partir de alimentos.
De este modo, los alumnos y alumnas pudieron conocer internamente las distintas actividades cotidianas de un inspector bromatológico, incluyendo además la solicitud de auditoría de buenas prácticas a productores de alimentos (BPM y HACCP) y los análisis de puntos críticos de control en el proceso de producción de alimentos específicos.