Luego de abrir con un inhibidor de alarmas, según precisaron datos a nuestro diario familiares de la víctima, se lanzaron a hacer compras indiscriminadamente por las ciudades de Junín y San Martín de los Andes. El gasto ronda los $300.000.
Según la sobrina de la víctima fueron apenas unos minutos mientras su tía se bajó a comprar pan sin tac, como la panadería no tenía el producto, volvió al vehículo que ya había sido visitado por los delincuentes.
La dueña de la cartera fue directo a su casa y revisó las tarjetas consumidas en distintos locales de la ciudad de San Martín de los Andes a los que logró comunicar este hecho. También realizó la denuncia policial. El gasto supera los 300 mil pesos y aún no se tienen datos de los autores de la estafa.
Algunos comercios colaboraron con la búsqueda de imágenes y lograron dar con estas fotos que comprometen a los autores del robo, aunque aún no se tienen mayores datos de su paradero. Se intenta saber cómo hicieron para comprar con tarjetas ajenas sin documentación de la propietaria.