En la sesión especial convocada por la Cámara de Diputados de la Nación para tratar la modificación del impuesto a los bienes personales se aprobó la propuesta del oficialismo por 127 votos a favor y 126 votos en contra. A diferencia de lo que ocurrió con el Presupuesto 2022, el bloque del Frente de Todos sumó el acompañamiento de la izquierda y de otros legisladores no alineados con los dos espacios mayoritarios.
El dictamen con media sanción, que sumó la mayoría de las voluntades de la Comisión de Presupuesto y Hacienda presidida por el diputado oficialista Carlos Heller, sube el mínimo no imponible a 6 millones de pesos en general y a 30 millones de pesos en el caso de inmuebles destinados a la vivienda del contribuyente. Además, fija una alícuota diferencial del 1,5% para quienes tienen un patrimonio mayor a 100 millones de pesos. Adicionalmente, la alícuota para quienes poseen más de 300 millones de pesos se incrementa al 1,75% y se establecen alícuotas para bienes radicados en el exterior que llegan al 2,25%.
Además se estableció la actualización del mínimo no imponible según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) generado por el Indec, lo que va a permitir que los pisos para el pago del impuesto no queden retrasados con respecto a la inflación.
El diputado neuquino Guillermo Carnaghi (Frente de Todos), integrante de la Comisión de Presupuesto, destacó que “con las modificaciones que se introdujeron vamos a tener una ley más progresiva, que beneficia a cerca de medio millón de contribuyentes, y que a la vez limita el impacto fiscal”.
Sobre la sanción definitiva de la ley, Carnaghi señaló que “se hicieron consultas con el Senado, y existe el compromiso de que se trate antes de fin de año, por lo que los beneficios que introduce el proyecto van a entrar en vigencia en el 2022.”
Por su parte, la diputada del Frente de Todos Tanya Bertoldi destacó la aprobación del proyecto de ley «se logró un proyecto virtuoso. Que plantea un sistema tributario progresivo y sin costo fiscal ben