Es parte de las acciones de prevención que encara la cartera de Ambiente nacional. Las aeronaves tendrán base en San Martín de los Andes y Bariloche, y servirán para dar respuesta al ataque inicial en Parques Nacionales y otras jurisdicciones. Además está a disposición la Brigada Nacional Sur.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, a través del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), envía medios aéreos a la Patagonia de cara a la temporada de peligrosidad de incendios forestales durante el verano. Gracias a una importante inversión de recursos, se desplegó un avión hidrante y un helicóptero que harán Regimiento de Caballería del Ejército Argentino en San Martín de los Andes, provincia de Neuquén, y un avión hidrante y un helicóptero para la localidad rionegrina de San Carlos de Bariloche.
Asimismo, ya se encuentra disponible la Brigada Nacional Sur con base en Las Golondrinas, provincia de Chubut, conformada por 60 brigadistas que realizan tareas de capacitación, asistencia y apoyo técnico para las coordinaciones regionales del SNMF, las provincias y la Administración de Parques Nacionales.
El Ministerio que conduce Juan Cabandié organizó también jornadas de integración, entrenamiento y talleres para brigadas de incendios forestales de los sistemas provinciales de manejo del fuego de las provincias de Río Negro y Chubut, y del Parque Nacional Lago Puelo.
De acuerdo a un informe del Servicio Meteorológico Nacional, para los meses de diciembre, enero y febrero se anticipan condiciones adversas: el desarrollo del fenómeno “La Niña” dará lugar a temperaturas por sobre el promedio y a precipitaciones por debajo de la media sobre varios sectores de Argentina, en especial en la Patagonia. Por este motivo, sumado a la falta de lluvia y nieve que se produjo en el invierno, se registra mayor disponibilidad de combustible superior a lo normal, factores que facilitan la ocurrencia de incendios de acuerdo a la evaluación del Ministerio de Ambiente.
Las acciones que lleva adelante la cartera ambiental nacional forman parte de una política de prevención de incendios forestales en todo el país, para la que se ha profundizado el financiamiento. A partir de la creación de un fideicomiso con alícuota del tres por mil de pólizas de seguro, se incrementó el financiamiento del Servicio Nacional de Manejo del Fuego en $ 2.640 millones. Dicha suma se añade al presupuesto 2021, que contempla para el área $ 418 millones, por lo que la inversión total asciende a más de $ 3.000 millones.
De esta manera, el presupuesto disponible para el año en curso es siete veces mayor que lo ejecutado el año pasado.
Cabe destacar que la Nación toma intervención luego de cumplirse los primeros niveles de actuación ante incendios forestales.
En primer lugar comienza la responsabilidad jurisdiccional, donde las provincias y los parques nacionales responden de manera inmediata y actúan sobre los focos ígneos. En un segundo momento, de ser necesario, la jurisdicción coordina el pedido de colaboración al resto de la región. Y, por último, en el tercer nivel, si la magnitud del incendio supera el apoyo regional, se pide colaboración a otras regiones con la coordinación del Servicio Nacional de Manejo del Fuego.
El 95 % de los incendios forestales son producidos por intervenciones humanas. Entre las primeras causas se encuentra el uso del fuego para la preparación de áreas de pastoreo. Otras causas que prevalecen son el abandono de tierras, las fogatas y las colillas de cigarrillos mal apagadas. Los factores climáticos, como la falta de precipitaciones, las temperaturas elevadas, el bajo porcentaje de humedad, las heladas constantes y los vientos fuertes, inciden en la propagación del fuego. Vale resaltar que, frente a la presencia de estas condiciones, deben extremarse las precauciones.