El Día del Cine Nacional en Argentina, que conmemora el estreno de «La Revolución de Mayo» en 1909, marca el inicio de la tradición cinematográfica. Desde sus comienzos hasta su reconocimiento mundial en la actualidad, el cine argentino ha sido un reflejo cultural y social, contribuyendo significativamente a la identidad nacional y abordando una amplia gama de temas a lo largo de su historia.
«La Revolución de Mayo» marcó el inicio del cine argumental en el país, aunque carecía de sonido y se dividía en quince partes con carteles explicativos, logró capturar el arraigo cultural argentino. Hoy en día, el cine argentino es reconocido mundialmente por la calidad de sus producciones y actores, celebrando así su historia y contribución a la cultura y sociedad.
El cine nacional ha obtenido dos Premios Oscar, con «La historia oficial» de Luis Puenzo en 1986 y «El secreto de sus ojos» de Juan José Campanella en 2010. A lo largo de la historia de los Premios Oscar, ocho películas argentinas han sido nominadas, desde «La tregua» en 1975 hasta «Argentina, 1985» en 2023.
HISTORIA DEL CINE ARGENTINO:
Los primeros pasos del cine argentino se remontan a finales del siglo XIX y principios del XX. Las proyecciones de películas fueron posibles gracias a los cinematógrafos de los hermanos Lumière, con presentaciones en el Teatro Odeón en 1896. La llegada del cine a Argentina estuvo marcada por la labor de inmigrantes europeos como Henri Lepage, Max Glücksmann y Eugène Py.
El cine argentino no solo entretenía, sino que también se utilizaba como medio para la educación patriótica y la difusión de un imaginario colectivo. Obras de ficción y documentales reflejaban episodios históricos y valores nacionales, contribuyendo así a la construcción de una identidad argentina. Aunque inicialmente enfocado en la exaltación de los progresos técnicos y científicos, el cine argentino eventualmente abordó temas sociales y políticos, reflejando la evolución de la sociedad argentina a lo largo del siglo XX.